Bendita calma la de esta semana, justo
esa clase que asusta antes de la tormenta y, en nuestro caso, va a arrasar con
la fragilidad mental que Hollstein nos está generando.
Empezamos el episodio con advertencias
de Laura y la voz de Vordenberg enfrentándose para exhortar a los miembros del
cuerpo estudiantil que no confíen en ninguno de los dos bandos cuando en el
fondo se escuchan los gruñidos de una no tan inútil felina negra. Tal parece
que Carmilla está tan harta como nosotras de escuchar al anciano y está tomando
cartas en el asunto atacando el cuartel del Baron, no obstante, sus intentos no
han dado frutos hasta ahora.
Una vez interrumpida la transmisión,
Laura sabe que el tiempo está en su contra así que deben actuar rápido para
liberar a los alumnos cautivos y escapar pero desafortunadamente están cortos
en números si comparan el grupo formado por los Zetas, las Summer’s y los
aldeanos… La cosa realmente no pinta de forma positiva bajo una perspectiva
realista, sin embargo, a Perry se le ocurre que podrían unir fuerzas con los
tipos de Corvae pero Laura desestima la idea, pues no cree que haya algo peor
que lo actual salvo pedirle ayuda al conglomerado maligno que la Decana tuvo
como aliado. Aún tienen lo que los archivos de Mattie puedan ofrecer,
lamentablemente Vordenberg sólo tiene como debilidad ser un simple humano y su
poder reside precisamente en que es el Presidente de la Mesa directiva de la
universidad, ahora bien, para restarle sus prerrogativas como tal deben
encontrar la Carta original e intentar destruirla con la mínima posibilidad de
que eso reduzca su poder o le haga algo peor (Si el comentario alarmo a
LaFontaine, deberíamos preocuparnos también, ¿no?)
En ese instante entra una videollamada
de Mel y Theo, cosa que no hace gracia a Danny pero las intenciones de su
llamada son relativamente justas, la intención de los Zetas para adular a
Vordie era recuperar el poder del campus pero han reconsiderado ahora que el barón
casi le vuela la cabeza intentando dispararle a Carm. Su propuesta es la
siguiente: Dado que también están en desventaja numérica comparados con los
aldeanos, pueden utilizar su influencia en los alumnos atrapados en las
catacumbas- los cuales suman casi quinientos- y pedirles que peleen a su lado
para recuperar la escuela. Es un plan sencillo pero falta confianza entre ambos
bandos, podría ser una misión suicida pero hay ciertos riesgos que se deben
correr.
Cortesia CarmillaCracks en Tumblr |
Si yo fuera la Decana, los mataría a todos.
... Quizá se a teniño el pelo. (Referencia a que algo es extraño en Perry)
Tras una pausa para debatir los pros y
contras de ir a pedirle ayuda a los chicos en las catacumbas, Danny se propone
ir ella sola para evitar que alguien salga herido o corra riesgos innecesarios –
mientras en el fondo vemos a Mamá Perry en una posición un poco inusual para
ser ella-
Actuar normal según la Decana. |
* No te puedo dejar con ella...
** Danny no seas hipocrita.
*Está leyendo: "Como asesinar silenciosamente a tus victimas"
** Tú leiste Crepúsculo y no te juzgué...
...pero Laura es tan condescendiente, no quiere dejarla ir por su
cuenta, no se siente capaz de perder a más personas pero Danny está consciente
y resignada ante la posibilidad de que pueda sufrir y morir pero no le
importaría si fuera por la razón correcta… por
la persona correcta. (Ash…
Lawrence, no te perdono
matar a Mattie pero te quitaré puntos de odio por esa frase) y en el momento en que Laura capta lo implícito en las palabras
de su amiga, Kirsch señala que Theo le está dando luz verde para seguir el
plan. El suspiro que deja escapar Danny mientras da una última mirada a Laura y
Kirsch fue casi doloroso.
Ignoren que es Hollence, sientan la esencia de la imagen... La mirada. |
El amor tendrá sus sacrificios. |
Con esa impresión de sacrificio nos
quedamos en espera de los fatídicos tres episodios finales.
#N
No hay comentarios:
Publicar un comentario